Entonces, para facilitarlo, hemos separado algunas atracciones, actividades y alimentos que necesita experimentar en esta primera visita a la ciudad.
1. Pasear por Central Park
Uno de los símbolos más importantes de Nueva York, Central Park es un gran parque ubicado entre los vecindarios Upper West Side y Upper East Side en el distrito de Manhattan.
Construido en 1857, Central Park experimentó una importante revitalización durante las décadas de 1980 y 1990 y desde entonces se ha convertido en una parada obligatoria para quienes visitan la metrópoli por primera vez.
El parque cubre más de 300 hectáreas, así que reserva un momento del día para caminar y ver las principales atracciones del espacio, como Strawberry Fields, un monumento en honor a John Lennon y la estatua basada en el famoso libro infantil de Alicia en el País de las Maravillas.
2. Disfrutar sin prisas del MET – Metropolitan Museum of Art
El MET - Metropolitan Museum of Art está ubicado alrededor de Central Park, en la Quinta Avenida, y es el museo de arte más grande de los Estados Unidos. Fundado en 1870, el MET se divide en diecisiete departamentos y tiene una colección de más de dos millones de obras de arte.
La colección MET abarca casi 5000 años de producción artística: la pieza más antigua es un jarrón iraní del 3800 a. C. Si te gustan las civilizaciones antiguas, asegúrate de ir al ala dedicada a Egipto, que reúne más de 26 mil objetos.
Entre las obras de arte en exhibición se encuentran obras de grandes nombres como Van Gogh, Rembrandt, Leonardo Da Vinci y Monet.
3. Sentir el bullicio de Times Square
La visita a Times Square es una de esas visitas obligadas en tu primera vez en Nueva York. El tramo, que es una intersección de varias calles en el corazón de Manhattan, está lleno de edificios comerciales, teatros y carteles luminosos que se reconocen en todos los rincones del mundo.
Ir a Times Square es una experiencia increíble: realmente te sientes parte del bullicio y la grandeza de la metrópoli. Da preferencia para conocer la región por la noche y déjate encantar por las luces y el movimiento.
4. Embarcar en el ferry de Staten Island
El Staten Island Ferry es un viaje en ferry gratuito entre los distritos de Manhattan y Staten Island, y la razón por la que necesita incluirlo en su primer horario de Nueva York es simple: el paisaje privilegiado que incluye la Estatua de la Libertad.
Sí, durante el viaje, que dura media hora en cada sentido, es posible ver de cerca la Estatua de la Libertad, ya que el ferry prácticamente pasa frente a ella. Además, también puedes ver el Puente de Brooklyn y Nueva Jersey, así como el famoso horizonte de la Gran Manzana, llena de rascacielos.
5. Probar un Bagel
Uno de los alimentos más emblemáticos de Nueva York es, sin duda, el bagel. De origen judío, el rollo en forma de disco es una verdadera institución en la ciudad, y cada neoyorquino que se precia tiene su tienda favorita de bagels.
6. Comer pizza, comida tradicional de Nueva York
La metrópoli está llena de pizzerías y la costumbre entre los neoyorquinos es comprar pizza por pieza para comer en la calle entre citas.
La primera pizzería que se abrió en la ciudad fue la de Lombardi, que todavía opera en dos ubicaciones en Manhattan. La casa es muy acogedora y tiene un menú con sabores tradicionales; Uno de los aspectos más destacados es la pizza de pepperoni con salchichas italianas, anchoas y ricotta.
Ahora que tienes esta lista, reserva una de las opciones de hoteles de Nueva York y disfruta de tu primera vez en la ciudad que no duerme.
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