4/2/22

Hotel Hospes Palacio de Arenales Spa, Cáceres

Extremadura está repleta de lugares únicos y eso ya lo venimos repitiendo desde hace tiempo en el blog. En mi última visita a estas hermosas tierras pude alojarme en el Hotel Hospes Palacio de Arenales, una base perfecta para recorrer gran parte de la provincia de Cáceres. Hoy os traigo mi experiencia en este alojamiento que una vez fue un palacio de verano.


Dormir en el Hospes Palacio de Arenales & Spa


El hotel Hospes Palacio de Arenales se encuentra a las afueras de Cáceres. Es fácil llegar a través de la sucesión de rotondas situadas al oeste de la ciudad y desde allí al centro histórico hay apenas diez minutos de recorrido. De hecho hay un cartel visible desde la carretera que lo señala haciendo más fácil su localización. 

El Hospes Palacio de Arenales se sitúa en un antiguo palacio de recreo del siglo XVI de la poderosa familia de Los Golfines. La misma que tiene dos palacios en el casco histórico de la ciudad de Cáceres. 

Se puede entrar directamente con el coche hasta la entrada principal o dejarlo en el aparcamiento y acercarse andando. Esto es lo que hicimos nosotras al llegar en un caluroso día de verano de 2021. Veníamos cansadas de visitar Plasencia y otros lugares de la provincia y en nuestra elección de alojamiento fue clave que contara con piscina y jardín. Hay que decirlo, Cáceres en verano es muy calurosa y tener piscina se hace prácticamente imprescindible. 


Hospes Palacio de Arenales

El registro lo hicimos muy rápido y el personal, como sucede en todos los hoteles de la cadena Hospes fue sumamente amable. Nos indicaron dónde estaba nuestra habitación y hacia allí nos encaminamos cruzando un par de salones.

El hotel Hospes Palacio de Arenales se reparte entre dos plantas, siendo la inferior la más extensa y en la que están casi todas sus habitaciones. La tranquilidad está asegurada en unas estancias amplias que se asoman al campo y a la gran extensión verde de los jardines del hotel. 

Nada más entrar un recibidor distribuía los espacios entre el cuarto de baño, los armarios y la habitación propiamente dicha. El baño era muy amplio, con un buen surtido de productos de acogida, albornoces, secador, asientos y bañera con ducha.



Hospes Palacio de Arenales


Se agradecía el detalle de bienvenida del agua fresca y los colores tenues con una iluminación muy cuidada ayudaban a relajarse desde el primer momento. Desde el jardín llegaba el rumor de los aspersores que ayudaban a mantener el césped en perfecto estado a pesar de las altas temperaturas (los días que estuvimos en Extremadura hubo ola de calor en toda España).

Descansar en un hotel como el  Hospes Palacio de Arenales da la posibilidad además de disfrutar del spa del mismo. En nuestra tarifa teníamos incluido un circuito cada día y, por cuestiones del COVID, había que reservarlo con cierta antelación. No hubo problema, lo pusimos a última hora de la tarde para poder hacer visitas a lo largo del día y descansar entre el spa y la piscina al atardecer.


Hospes Palacio Arenales


Los salones del hotel, como el de arriba que hace las veces de biblioteca, son una maravilla. Hacía quizás algo de frío debido a la potencia del aire acondicionado, pero se agradecía la tranquilidad de los mismos e invitaban a quedarse las horas muertas leyendo un libro.

Para ir a la piscina no había que pedir hora pero sí estaba muy vigilado el acceso para que los huéspedes tuviéramos suficiente espacio de separación. Las camas balinesas estaban muy demandadas y la atención del chico que trabajaba repartiendo y recogiendo toallas era de lo más amable.


Hospes Palacio Arenales


En el aspecto gastronómico el Hospes Palacio de Arenales ofrece diversas opciones. Nosotras optamos por cenar un par de noches en el chiringuito de la piscina, mirando el atardecer tardío de verano con las cigüeñas regresando a los nidos que están dispuestos para ellas. Realmente un espectáculo precioso. La tercera noche cenamos en el restaurante y también salón de desayunos. La relación calidad precio no está mal y la calidad del producto está asegurada. Eso sí, la carta de la piscina es algo limitada aunque informal y si se cena muchos días seguidos puede resultar algo repetitiva.

El desayuno es muy completo, con productos de la zona (chacina, quesos, dulces etc.), zumos naturales y una amable atención y reposición constante. Ideal para tomar fuerzas y continuar visitando la provincia. Como ya hemos mencionado, la autovía pasa justo al lado con lo que acceder a distintos lugares de Extremadura es sumamente sencillo si se hace desde el hotel.

Así pues, si viajáis próximamente a Cáceres os recomiendo este estupendo hotel, con buena relación calidad-precio, zonas comunes amplias e instalaciones de lo más adecuadas y relajantes. Hay tantas cosas que hacer y ver en Cáceres que te faltará tiempo y querrás volver. 


Lo mejor del hotel Hospes Palacio de Arenales Spa: su ambiente, jardines y decoración.

Lo peor del hotel Hospes Palacio de Arenales Spa: que no esté en el centro de la ciudad monumental, pero claro, entonces sería algo muy diferente. 



Si quieres reservar en el hotel Hospes Palacio de Arenales sigue este enlace de afiliación y colaborarás con el mantenimiento del blog. 

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Muchas gracias por dejar tu comentario en Ida y Vuelta.

COLABORACIONES