18/4/23

Parador de Soria

El Parador de Soria es de esos paradores modernos enclavados en lo alto y con unas maravillosas vistas de la ciudad. Aquí os contamos cómo ha sido nuestra experiencia en este estupendo alojamiento, ideal para visitar tierras sorianas. 

Parador de Soria: dormir con vistas al Duero y más allá


Ya antes de empezar a visitar la ciudad de Soria uno se puede hacer una idea de lo que verá con la impresionante vista que se tiene desde el Parador de Soria. Se trata de un edificio de nueva planta, construido en los años 60 del siglo XX y ampliado en 2004. No destaca, en efecto, por ser un parador-monumento como el Parador de Santiago de Compostela, pero sí cuenta con unas vistas increíbles. 

La subida en coche, por una carretera sinuosa y bordeada por un camino elevado para paseantes o corredores, lleva a pensar que está lejos del centro de la ciudad. Nada más lejos de la verdad, sólo hay que seguir las indicaciones del personal de recepción que te guían perfectamente para que en unos 10 minutos andando estés en pleno centro urbano. 

Otro cantar es subir al Parque del Castillo desde la ribera del Duero. Sin duda será algo más fatigoso si vamos andando, pero merecerá la pena. 

El edificio no destaca entre la arboleda del Parque, más bien al contrario, ya que desde abajo se confunde entre los árboles. Sin embargo, sí llaman la atención los innumerables miradores que tiene. Esto le proporciona una luz increíble a los diáfanos interiores, decorados con sobriedad. La pequeña cafetería, demasiado pequeña, se sitúa junto a recepción y mira sin pudor hacia el Moncayo, allá a lo lejos. 



Parador de Soria


Los ojos del viajero se van hacia el paisaje en cuanto uno entra en la habitación del Parador de Soria. En nuestro caso se trataba de la 419, una bonita suite con zona de estar y un baño enorme. Al ser de gran tamaño y encontrarse en la esquina del edificio contaba con ventanal-mirador orientado hacia la ciudad pero también cristaleras sobre el Duero. 

La habitación se encontraba precedida por un distribuidor con armarios. El espacio de dormitorio era amplio, con un sofá cama, mesa de centro, escritorio y butaca. En la terraza acristalada había dos sillas y una tumbona para dejar pasar las horas muertas mirando hacia el Duero. La temperatura de la habitación en esta extraña Semana Santa era bastante elevada ya que la cristalera favorecía la buena temperatura. Además, el parador está decorado con materiales cálidos para conservar el calor en el duro invierno soriano. 


Parador de Soria


El cuarto de baño, muy grande, se encontraba revestido por mármol verde. Además, contaba con una curiosa solución de bañera esquinera con vistas al Duero y ducha al lado con una mampara bien pensada para evitar que el agua se saliera. Los abundantes productos de acogida, los albornoces y zapatillas y la amplitud del cuarto baño aumentaban, si cabe el confort del Parador de Soria, moderno y con buenos servicios. 

La tarifa que escogimos llevaba la media pensión, que utilizamos dos noches para cenar de manera abundante y con productos típicos de Soria y su provincia. Platos como la sopa castellana, las croquetas de boletus, las migas o el cochinillo hacen las delicias de los comensales que buscan producto de calidad, tradicional pero con un toque moderno. 


Parador de Soria


En el primer sótano podemos ver los restos de la muralla medieval, que se está recuperando en el entorno del Parador y que salieron a la luz con la ampliación de 2004. Es fácil que en una ciudad tan repleta de historia como Soria, los restos históricos se encuentren en especial en lugares emblemáticos como este cerro en el que está el Parador. Esto recuerda, sin duda, al Parador de Lorca, en cuyo entorno se encontraron restos de la judería que hoy se pueden visitar. 


Parador de Soria


Tras disfrutar de la luz del atardecer desde la habitación, sólo queda tomar el camino indicado y bajar al centro o desviarse hacia el Duero para conocer esta ciudad de historia, patrimonio y poesía. Aquí te dejo qué ver en Soria en dos días, seguro que te gusta el recorrido propuesto.

Lo mejor del Parador de Soria: su personal, siempre con una sonrisa y una palabra amable, su emplazamiento y sus vistas. 

Lo peor del Parador de Soria: a veces se echa de menos que estuviera más en el centro, pero a cambio, no tendría esas vistas. 
 

2 comentarios :

  1. The stunning views of the city and the Duero, combined with comfortable and modern amenities, make it a perfect haven for travelers. It's lovely to hear that the staff is warm and welcoming and that the local cuisine adds a delicious touch to the stay.

    ResponderEliminar
  2. The Parador of Soria is a great place to stay, Austin. You will really enjoy it if you decide to travel to the historic and beautiful city of Soria. Thank you very much.

    ResponderEliminar

Muchas gracias por dejar tu comentario en Ida y Vuelta.

COLABORACIONES